El castrum de Dolmayrac está construido sobre un espolón rocoso que domina el valle del Lot. En la Edad Media, el pueblo estaba protegido en la punta por un edificio fortificado con dos torres cuadradas separadas por 300 metros. Hoy en día sólo queda una de estas torres. La torre de Dolmayrac, construida a finales del siglo XIII o principios del XIV, protege el pueblo por el lado de la meseta, donde hay menos defensas naturales. El sistema de defensa consistía en la torre conservada, las murallas que rodeaban el pueblo y un edificio en la punta del espolón. El primer nivel está abovedado con una bóveda de cañón roto en ladrillo. El segundo nivel es abovedado con arcos sobre ménsulas, con accesorios domésticos, ventanas, chimenea, armarios de fregadero y letrina. La terraza del tercer nivel tiene vistas al valle.
